sábado, 8 de septiembre de 2007

La espeluznante historia de Psicología de la Comunicación (Parte II)


Quedamos en que yo estaba tranquilazo. Confiado en que veía Psicología de la Comunicación en paralelo durante el cuarto semestre y seguía con mi vida universitaria como si nada y sin contratiempos. Total, yo siempre estuve convencido que era psicólogo por genética. ¿Y cómo no creerlo si mi padre era para ese entonces el director de la Escuela de Psicología de la Universidad Central de Venezuela?

Así arrancó mi cuarto semestre: con una piedrita en el zapato y con una actitud de "que ladilla ver esta vaina que yo conozco de arriba pa abajo, de alante pa atrás, de misionero y de cuatro patas". Mmmmm... No. Como decía Ángel Antonio: ¡ERRROOOOR!

Claro, si llegas a la primera clase con esa actitud es muy probable que te ladilles bastante rápido. ¿Para qué voy a venir yo para acá? Presento los exámenes y listo. Otra vez: ¡ERRROOOOR!

Lo que les presento a continuación es un resumen de mi record psicologístico. No es obra de la ficción. No estoy inventando nada. Tengo mi expediente curricular al frente y lo copio todo directamente de allí. Pillen:

Tercer semestre: 2-1998: Psicología de la Comunicación: Nota Final 00
Cuarto semestre: 1-1999: Psicología de la Comunicación: Nota Final 00

A partir de aquí se jodió todo y no pude continuar el sendero universitario con normalidad. Así que sólo haré referencia a los períodos y no a los semestres, porque simplemente ya eso de los "semestres" no tenía sentido para mi.
  • 2-1999: Psicología de la Comunicación: RT (Retirada)
  • 1-2000: Psicología de la Comunicación: PI (Perdida por inasistencia)
  • 2-2000: Psicología de la Comunicación: Nota Final 00
  • 2-2001: Psicología de la Comunicación: PI (Perdida por inasistencia)
  • 2-2002: Psicología de la comunicación: RT (Retirada) - Época de Paro *
  • 2-2003: Psicología de la Comunicación: Nota Final 06 **
  • I-2004: Psicología de la Comunicación: Nota final 16 ***
Antes de explicar los asteriscos, tengo que confesar que viendo las "notas", no las entiendo. Recuerdo que siempre me raspaban en la raya, así que no comprendo todos esos 00. Tampoco entiendo una de esas PI. Pero bueno, ahora sí. Las explicaciones de los asteriscos:

*: Yo asumí la causa nacional y me sumé al paro cívico nacional. En este caso paro cívico académico. Muy pendejo.

**: Este es un cuento largo e intenso que involucra cartas ala Consejo de Escuela, al Consejo de Facultad, reencuentros, lágrimas y desapariciones. Este cuento merece un post completico. Será la tercera entrega de "La espeluznante historia de Psicología de la Comunicación".

***: Por fin! Lo hice. Tomé un curso intensivo de verano y pasé la materia. También hay que desarrollarlo bien en su post particular.

Aunque no me quiero extender mucho en el personaje en esta entrega, tengo que decirles que parte de mi fracaso con Psicología de la Comunicación es que las clases de la profesora Lucía Azuaje me daban muuuucho sueño. Demasiado. Era algo que podía más que yo. No lo podía controlar. Y créanme que estaba muy conciente del problema y hacía mi mejor esfuerzo para no cabecear en sus clases, pero nada. No podía.

Otro punto importante es que en teoría tuve tres profesores de Psicología de la Comunicación. Leoncio Barrios, con el cual nunca pude ver una clase por aquello del desastre de tercer semestre en la Escuela; Lucía Azuaje, quien es protagonista principal de esta historia, y Patricia Fuenmayor, quien iluminó el camino al aula magna en aquel curso de verano. Esto me hace sacar una conclusión que es bastante obvia: la profesora Lucía Azuaje y yo no éramos compatibles.

Luego de todo este cuento no crean que aprendí la lección. Sigo estando completamente seguro que soy psicólogo por naturaleza. De hecho, ahora es peor, porque a la teoría de "la proyección" (herramienta única, básica y fundamental que utilizo desde 4to año de bachillerato), le agrego todo mi "amplio" entendimiento sobre la comunicación humana. Así que ténganme miedo. Soy un acucioso observador que estudia cada movimiento de su entorno. No hay detalle que se me escape. Y no hay persona que se salve de mi profundo análisis.

Te conozco bacalao.

2 comentarios:

Unknown dijo...

jajajja ay Carlitos, varias cosas: *Yo también era una loca opositora sumada al paro... y no me quedó ninguna materia (al menos no ese semestre jajja)... **Ahora, toda la razón con Lucia Azuaje, yo personalmente estuve a punto de dejar la materia sólo por no escuchar sus loqueras... lloraba en clases, acusaba a la gente de racistas, de enviarle supuestos correos homicidas... jajjaja... En eso sí puedo dar fe de tu veracidad periodística.

Armonía Turística dijo...

Mi pana Carlos, no se a ciencia cierta si nos conocemos personalmente, pero me identifico plenamente contigo. Yo padezco lo mismo que tantos estudiantes de la escuela sufren: EL bendito carma de la psicologia de la comunicacion. Y que la primera vez que la cursé por alla en el 98 marcó mi desgracia. ya son 7 veces que la he visto y cada vez me queda con una nota pirrica entre 07 y 09. las preguntas estan de más, que ocurre???, de pana no sé.

Ya he salido de toda vaina, solo mequedan esas benditas marías de Psicologia, Historia de la com, sociopolitica y etica. Nada mas que eso, y cada semeste es un viacrucis para lograr pasarla y nada men, en cuanto llega el parcial, suassss, me clavan como aun pendejo.

Y lo peor es que la materia la entiendo de forma clara, dado que terapauticamente la practico con mi esposa cada vez que estudio, pero cuando dictan esas preguntas de desarrollo, la termino cagando.

TE gradecería amigo mio, pudieras darme el dato de como hiciste para pasar la materia con patricia en verano.

Saludos

Igor